La alteración estética de la nariz es uno de los motivos de consulta médica especializada más frecuentes, ya que esta parte del cuerpo es la región central de la cara, una de las zonas más llamativas y que representa la armonía facial.
La doctora Andrea Báez, de la Clínica de la Dra. Luz Marina Díaz , dio a conocer que dentro de las alteraciones de la nariz se encuentran la punta nasal caída o redondeada, con falta de proyección, sin soporte estructural en la columnela, que es la región de piel situada entre las fosas nasales, además de ángulos nasales no proporcionados generando una nariz prominente o con “gibas”.
También hay alteraciones secundarias, que sin cirugías plásticas de nariz, pueden ser corregidas armonizando el rostro mediante la rinomodelación.
Precisamente, con la Rinomodelación se eleva la punta y respinga la nariz, se permite que el dorso se vea recto y camufla esas gibas, afinando el rostro.
En qué consiste la rinomodelación
Este procedimiento consiste en la inyección de pequeñas cantidades de ácido hialurónico (Juvederm®) en zonas específicas de la nariz, según el resultado que desee obtener el paciente.
Éste material inyectado es biocompatible, el cual es asimilado por el cuerpo sin producir efectos deletéreos, ni complicaciones. Viene para su aplicación con lidocaína, que es un anestésico para minimizar las molestias, aunque el procedimiento tiene un nivel mínimo de dolor.
De acuerdo con la especialista de la clínica de la Dra. Luz Marina Díaz, los resultados son inmediatos y se mantienen durante un año a un año y medio según el metabolismo propio del paciente.
Posterior al tratamiento se recomienda no masajear el área tratada, no uso de sauna, jacuzzi, ni piscina, y no realizar ejercicio físico intenso durante los siguientes tres días.